Dentro de los subtipos del eneatipo 6, el 6 Conservación destaca por ser una persona estable, sensata y profundamente protectora.

Cuando ha adquirido experiencia y confianza, se convierte en alguien prudente y sabio en sus decisiones, generando una atmósfera de estabilidad tanto en lo familiar como en lo laboral.

Cuida de sus seres queridos, aporta tranquilidad al entorno, ayuda sin pedir nada a cambio y se gana a los demás por su actitud positiva y colaboradora.

Ahora bien, esta búsqueda de seguridad también tiene un precio.

El «aseguracionismo» extremo implica una tendencia a priorizar el vínculo o la estructura (trabajo, pareja, grupo) por encima de sus propias convicciones o deseos personales.

Algo que en la práctica puede traducirse en aceptar situaciones incómodas o poco satisfactorias, con tal de no arriesgarse a perder estabilidad o protección.

Así el precio de esta estrategia llevada al extremo puede ser quedarse estancado.

El 6 Conservación puede acabar encerrado en una rutina que parece segura, pero que en realidad limita su evolución.

Trabajo – Casa – Descanso – Casa – Trabajo…

Sin desarrollo profesional.

Sin crecimiento personal.

Sin verdaderos retos.

Y para salir de aquí, la mejor estrategia es poner a trabajar su flecha al eneatipo 3.

Porque cuando activa esta energía…

… empieza a valorar sus capacidades,

se pone objetivos más ambiciosos,

asume riesgos,

y toma decisiones con más autonomía.

Sin depender tanto de la validación externa o la aprobación del grupo.

Querido 6C: lánzate un poco más.

Tu seguridad está bien construida.

No vendas tu libertad ni tu crecimiento a cambio de una sensación de seguridad que ya no necesitas tanto como antes.

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